Estimadas socias y socios de nuestro sindicato. Comprendemos perfectamente que cada uno de ustedes se encuentran expectantes y ansiosos de saber de qué modo se resolverá la incógnita de las remuneraciones.
Al respecto, les pedimos algo de calma. Nos hemos comunicado con gerencia, y aún se encuentran evaluando las situaciones relativas al asunto, y al igual que ustedes estamos atentos aguardando cuáles serán las medidas que se tomarán.
Los dirigentes estamos plenamente sintonizados con el sentir de cada uno de ustedes, pero les puedo asegurar que ni como directiva, ni yo como presidente, tomaremos decisiones o posturas definitivas sin antes consultar a la asamblea.
Una vez más, les pedimos paciencia, apoyo y unidad. No es sencillo, pero estamos atento. Se los podemos asegurar.